Ya me va tocando, desaparecer, alejarme de los ruidos, explorar nuevos paisajes e intentar que el tiempo pase despacio. Me espera un mes de agosto de idas y venidas, de nuevas experiencias, y si los nubarrones se alejan dejar solucionados algunos papeleos burocráticos que mantienen mi cabeza alterada, como si los cuarenta grados estuvieran instalados perpetuamente en mi mente, para poder apreciar un horizonte más despejado. Así que, prepararé mi coche que de nuevo me llevará por todas esas carreteras e intentaré ir sin prisas, porque los viajes hay que acabarlos pero sobre todo vivirlos, sin agobiarte por llegar a todos los lugares, levantar una copa y disfrutar del mar o de una puesta de sol, reír en buena compañía, y permitir que la improvisación relaje cualquier expectativa. Pero antes dejaré los deberes hechos, porque aunque este mes de julio no ha sido muy prolífico, siempre hay un disco o alguna buena canción que echar a la maleta para que te acompañe esos soleados atardeceres de verano.
1) Liam Corcoran - "Hints and Traces": Y empiezo con un disco que me dará mucho juego por esos caminos veraniegos, se trata de un tipo que antes de lanzar el que es su tercer trabajo en solitario estuvo en una banda llamada Two Hour Traffic. Descubierto en MTD, ha sido el disco que más he escuchado este mes, desde ese comienzo con la pegadiza "Lead The Way", su primer single "Trouble´s So Easy To Find" y "If You Must Know" todas las composiciones rayan a la altura del mejor Ryan Adams, y no me extrañaría que a final de año se colara entre mis favoritos. Estupendo disco para los que amamos el rock americano.